Falta de valores...

     Esta tarde iba en el metro, era la hora pico, la gente se empujaban para abordar el tren. En eso se monta una señora, un señor que venía detrás de ella la iba empujando, consecuencia de las personas desesperadas que venían detrás del señor. La Sra. se volteó y le dijo:

_¿Sr. Qué le pasa? ¿Cuál es la empujadera?
A lo que el Sr. contestó:
_¿Usted no ve que me están empujando a mí también?_ Apártese del camino_.
_¡Viejo altanero!_ Dijo la señora con molestia.
_¿Qué le pasa? ¡4 pepas! (Ya que la señora llevaba lentes.)
_Viejo pasado, a que le doy una cachetada... Debería darle verguenza, falta de respeto.
_ ¡Ven y damela! ¡Aquí te espero!_ Dijo el señor con sarcasmo.

     Los demás usuarios que iban en el vagón se echaron a reir, pues la disputa entre los dos les causó gracia... ¡Qué lamentable! La tolerancia y el respeto se han perdido con el pasar del tiempo.

     Otro día iba en autobús, todos los puestos iban llenos, en eso se monta una Sra. embarazada, y los "caballeros", por así decirlo, se hicieron los dormidos. Una chica que iba sentada le cedió su puesto, al instante que le dijo:
_No señora, no se ponga a esperar a que algún hombre le dé el puesto. La caballerosidad se acabó... Pocos son los hombres que son verdaderos caballeros.
_Sí joven, tiene razón, que lamentable de verdad.

     Adultos, personas de la tercera edad, jóvenes... Todos han olvidado los valores que en algún momento sus padres le enseñaron. Yo no que sea tan viejo, pero mis padres me enseñaron a respetar, tolerar y valorar al prójimo. Los estudiantes de ahora- no todos- no tienen educación. No piden permiso, saludan al llegar a algún lugar, no ofrecen disculpas cuando deben reconocer su culpa...

     En fin, se han perdido aquellos valores que nos hacen mejores personas. Esto es un problema que se aprecia en todos los estractos sociales, ya que los de "muy alta categoría" son groseros también. Pero no todo es malo, siempre hay un grupo que se salva, el cual espero que siga incrementándose y logre rescatar la convivencia que poco a poco se va olvidando.

     Seamos personas educadas, de principios y valores, capaces de tolerar al prójimo. Marquemos la diferencia y rescatemos la sana convivencia y esta sociedad que tanto nos necesita.